El genio de la razón  produce monstruos.
Goya

EL LADO SENSIBLE DEL DICTADOR
El escuchar el nombre de Adolf Hitler, por si ya es de antemano una imposibilidad de saber que se puede tener sensibilidad.
He escuchado que quien adopta una las bellas artes es muy difícil que tome un camino por el lado oscuro, sin embargo, las condiciones para que Hitler se encaminara por el lado de la pintura le fueron negadas desde un principio, su padre le prohibió siempre el hecho de ser artista, le dijo -¡artista! No, mientras yo viva.

Siendo un mal estudiante y ocasionandole siempre disgustos y riñas constantes a su padre, Dos años después teniendo 63 años, Alois, de oficio aduanero muere, Adolf fue expulsado de la Realschule de Linz en 1904 a causa de sus deficientes resultados, termino la secundaria en un colegio de menor categoría y sin obtener el certificado que lo capacitaba para poder inscribirse en una universidad, tras la muerte de su padre sus estudios fueron de mal en peor, y nunca logro el titulo para poder ingresar a la Escuela de Arquitectura.

Entre el verano de 1905 que termino su enseñanza media y octubre de 1907, en que radico en Viena. Hitler llevo una vida de señorito inútil, enfermo y su madre fue muy pródiga satisface todos sus deseos, que dormía hasta bien entrada la mañana, asistía por las noches a la Ópera, y dibujaba planos para la remodelación urbanística de Linz hasta ya entrada la madrugada, establecía un horarioque sería la norma de su vida.
En la Ópera de Linz conoció al que fuera su único amigo de esos años August Kubizek, aceptable interprete de viola, Kubizek se convirtió en su incondicional confidente de sus fantasías y auditorio, subían con frecuencia a la colina de Freinberg, desde ahí Hitler trazaba proyectos para remodelarla, en alguna ocasión le comento que cuando dirigiera los destinos del pueblo, lo tiraría todo y reharía la ciudad, creía que la vocación de artista era la mas alta de las metas, hablaba de un mando que le daría el pueblo para liberarlo de la esclavitud y conducirlo hasta las cumbres de la libertad.
En 1906 estuvo dos meses en Viena viendo monumentos y asistiendo a la Ópera con el pretexto de preparar el ingreso para la Academia de Bellas Artes. En 1907, preparo su examen, Adolf logro pasar la prueba eliminatoria, pero suspendió en la segunda: “pocas figuras…” y fue rechazado “Prueba de dibujo no satisfactoria”.
Su decepción fue tan grande que le duraría toda la vida, reflejandola vívidamente en su Mein Kampf. Para información hay que decir que fueron 113 los candidatos y sólo 28 fueron admitidos. Le pidieron que probara en Arquitectura pero esa posibilidad estaba vedada.
Derrotado regreso a Linz su madre agonizaba, víctima de un cancer falleció en diciembre de 1907. De regreso a Viena logro que su amigo Kubizek se aposentara en le misma habitación que Hitler donde con el piano de media cola de Kubizek y lamesa de dibujo de Adolf apenas podían moverse, acudían a la Ópera dos o tres veces por semana y a veces a uno o dos conciertos.
En su tiempo de pobreza, Kubizek regresa a Linz para pasar sus vacaciones pero ya no regreso Hitler no iba a academia alguna ni tenía trabajo, vivía pobremente porque sus ingresos mensuales los gastaba en la Ópera, extraordinariamente desarrollaba una gran actividad, leía todo cuanto le caía en sus manos principalmente, novelas de aventuras, y dibujaba compulsivamente, un día rediseñaba el teatro de la Ópera y otro recorría los suburbios miserables de Viena y dibujaba la ciudad ideal de los obreros.
Dejo de percibir la pensión de su padre y vio reducidos sus ingresos a 25 coronas que sólo le alcanzaban para comprar leche y pan esto le obligó a dejar las pensiones y dormía en las bancas del parque por el verano y por el invierno en casas de caridad.
En una de ellas le encontró Reinhold Hanisch, un mercachifle que le animo a pintar postales y acuarelas, Hanisch, las vendía, en diversos lugares de Viena a precios que oscilaba entre 3 y 10 coronas, se quedaba con una comisión.
Las ventas de las postales le permitieron cambiar de alojamiento, se trasladó a la residencia masculina Männerheim, ahí permaneció por cinco años, encajaba perfectamente con su espíritu espartano de Hitler, que no fumaba ni bebía y comía poco, el reglamento obligaba a abandonar las habitaciones a las 9:00 y no se podía volver hastanoche en que era perceptivo apagar la luz.
Esto determino un cambio en sus costumbres, solía ir a la sala de lecturas a devorar toda la prensa, y después se colocaba junto a la ventana a pintar postales y acuarelas, al romper la sociedad con Hanisch sus ingresos se vieron mermados pero la verdad que por esa época entre 1910 y 1911 Hitler podía sobrevivir con sus trabajos artísticos muy modestamente.
En mayo se trasladó a Munich, Viena era un lugar peligroso y llevaba eludiendo el servicio militar desde 1909. En la capital de Baviera siguió con su vida oscura. Pintaba postales y acuarelas y realizaba trabajos domésticos a cambio de alimentos, Disfrutaba de ciertos ingresos, había declarado a hacienda 1,200 marcos al año cantidad que le permitía vestir bien y comer adecuadamente. Adolf con 25 años de edad pudo disfrutar de Munich, donde bullía la política y la cultura. Allí había residido cerca de dos años la década anterior Lenin; ahí Thomas Mann acababa de publicar Muerte en Venecia; allí, cuatro años antes había descubierto Kandinsky los secretos de los colores e iniciado su brillante carrera abstracta, pero esos detalles seguro Hitler no los conocía, odiaba a los costumbristas y en el arte moderno sólo veía “síntomas de la decadencia de un mundo que se descomponía lentamente.
En las modestas cervecerías muniquesas, comenzó a desplegar sus dotes de tribuno. Entonces estallo la gran guerra Hitler que había rehuido al serviciomilitar austrohúngaro, se alisto voluntariamente, fue un soldado ejemplar que logro entre otras condecoraciones la cruz de hierro de primera clase, rarísimamente otorgada a la clase de ropa y la mas apreciada entre el ejército aleman, en el cumplimiento de sus deberes militares de forma notable, continuo con su excentricismo, tenía aburridos a sus compañeros con sus discursos y sus teorías, lector retraído pasaba muchos ratos con Schopenhauer y a Nietzsche o con sus cuadernos de dibujo que eran mejores que sus postales de Viena, esos cuadernos sin duda alguna fueron los últimos en su incursión dentro del arte, tras la gran guerra cambio de inmediato… se dedicó a la política. ¿Acaso puede cambiar el azar el curso de la historia? O ¿el arte cambiar a un ser?

Germania, dibujo a lapiz rojo,
es una obra de estilo academicista,
que se supone elaborada en torno a 1912
Palacio de la Ópera de Viena, acuarela 1911.

El arco del triunfo de Minich
tuvo un significado especial
para el joven Adolf,
acuarela.

Puente viejo en Viena, es una de las obras del final de la estancia de Hitler en la capital austrohúngara. acuarela