Consultar ensayos de calidad


Batalla de carabobo - perspectiva constitucional, teórica e histórica



El proceso de integración Venezolano: perspectiva constitucional, teórica e histórica
El proceso de integración latinoamericana posee una nueva perspectiva en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y es el objetivo de esta investigación analizar su importancia jurídica y sus implicaciones teóricas e históricas. Utilizando la hermenéutica jurídica, se concluye que la nación venezolana ha intensificado las acciones para consolidar la integración latinoamericana con la finalidad de lograr los objetivos comunes propuestos en la región, ello a través de pactos, convenios y acuerdos que originan normas supranacionales. Además, la participación consciente en la globalización y la consolidación de naciones organizadas con pleno conocimiento de su papel fundamental en el mundo actual, tiene en Venezuela el respaldo jurídico necesario, lo cual representa un avance significativo en el constitucionalismo venezolano y es el soporte de un ulterior derecho comunitario.



Palabras clave: integración, integración latinoamericana, normas supranacionales, globalización, constitucionalismo, Derecho Comunitario, Constitución.
1-. Introducción:
En el actual momento de la historia, los Estados están en la búsqueda de concretar fines e intereses comunes y van perfilando movimientos tendientes a la integración. Como proceso mundial, Venezuela también enmarca sus políticas hacia la integración, y más aún, al fortalecimiento de las relaciones Sur-Sur. Esta realidad debe entenderse dentro de un contexto de globalización, de movimiento posmodernista y al mismo tiempo de un nuevo paradigmaconstitucional que promueve la participación, además de una serie de transformaciones en el sistema socioeconómico, en el poder público y en la proyección de la nación en el plano internacional.

El camino hacia la consolidación de la integración latinoamericana propuesto por Venezuela se debe analizar a la luz del orden jurídico nacional y de las teorías sobre la integración que permitan explicar su evolución, fines y perspectivas.

Aspectos fundamentales de la integración
Para entender el proceso de integración se ha estudiado su cauce histórico, tipos de integración y las dimensiones de este proceso.
Así, en la era contemporánea la comunidad internacional presenta cambios de gran envergadura, pues las distancias entre los Estados se reducen, intensificándose las relaciones económicas, científicas, tecnológicas, religiosas, entre otras, y porque el propio protagonismo del Estado se debilita frente a los poderes económicos o se reencauza en procesos mayores (Ciuro, 1998), dando paso al surgimiento de la integración de los Estados para conformar comunidades en bloque, como por ejemplo, el MERCOSUR y la Unión Europea. Esto produce cierta privatización de la comunidad internacional, pues ya el núcleo de ésta no lo es el Estado, sino las cuestiones relativas a las actividades del hombre en su sentido amplio, envolviendo aspectos económicos, políticos, sociales y culturales de las naciones, aspectos sobre los cuales se ocupan los procesos de integración creando una inevitable red interestatal.
En América Latina, las primeras propuestas relativas a una posible integración corresponden a la ComisiónEconómica para América Latina y el Caribe (CEPAL), organismo de las Naciones Unidas. En esencia, la primera corriente de tipo integracionista del pensamiento latinoamericano en el siglo XX nació en el seno de la entidad y desde allí experimenta una rápida evolución en todo el continente. Su análisis se centraba en la vinculación asimétrica centro-periferia con el consecuente deterioro de los términos de intercambio.

Las bases de la concepción global de integración para la CEPAL se fundamentan teóricamente en tres aspectos:
1) La oposición centro/periferia, en síntesis plantea que la economía mundial tiene dos polos, el centro y la periferia, cuyas respectivas estructuras productivas difieren sustancialmente aunque están comunicadas y condicionadas mutuamente.
2) La industrialización periférica conlleva a un desarrollo estructural de la industrial del continente cuya expresión es la heterogeneidad y la especialización.
3) Los sectores exportadores en el continente eran como extensiones de ultramar de sus socios metropolitanos, con quienes desarrollaron fuertes lazos comerciales y financieros (Sánchez, 2007). Además, aporta dos caminos analíticos como son la tesis sobre la A“dependenciaA” y la tesis de la A“heterogeneidad estructuralA”. El precursor o A“padreA” de la teoría de la dependencia fue Paul Barán, quien con su obra supuso un cambio de paradigma en los estudios sobre el desarrollo. 3
En la práctica, los intereses regionales en un mercado globalizado sólo pueden protegerse y fomentarse en forma adecuada cuando América Latina pueda consolidar una política de unidad deacción y de objetivos comunes, a través de los cuales se pueda alcanzar una real integración económica, cuestión que analizaba la CEPAL desde 1968 (Sánchez, 2007).
Igualmente, uno de los problemas cruciales para avanzar en el proceso integrador es lograr una concepción científicamente fundamentada del mismo. Actualmente, en América Latina, en el discurso de ciertos actores, se observa cierta laxitud en la comprensión del concepto de integración, los usos no rigurosos de este concepto están conduciendo a identificar con integración cualquier asociación de tipo comercial, al margen de la naturaleza de esa asociación y de sus actores. Pareciera que en ocasiones se conciben como idénticos integración y apertura comercial. En este enfoque tan amplio se corre el peligro de que se diluya la esencia de lo que significa una plena integración de los países latinoamericanos, en la llamada Comunidad Latinoamericana de Naciones.

En el desarrollo teórico, se han planteado varios tipos de integración:
1) La integración económica, que puede ser definida como proceso, no es otra cosa que el programa escalonado de eliminación de las barreras artificiales a los intercambios de bienes y a los movimientos de factores productivos.
2) La integración organizada, que adiciona a la liberación de los intercambios, la coordinación de las políticas económicas.
3) La integración de las economías, que se refiere a las diversas operaciones más o menos simultáneas, pero ligadas y complementarias, que consisten en establecer y mejorar todas las relaciones convenientes para el intercambio de productos, factores einformaciones entre las partes de las que se proyecta hacer un conjunto; así como hacer progresivamente más compatibles los proyectos económicos de los elementos que componen el conjunto.
4) La integración centralmente planificada, que es un proceso objetivo, regulado planificada mente, de aproximación, adaptación mutua y de optimización de sus estructuras económicas nacionales en el conjunto internacional que forman; un proceso de formación de vínculos de cooperación profundos y estables en las ramas principales de la producción, la ciencia y la técnica; de ampliación y de afianzamiento del mercado internacional de dichos países mediante la creación de las correspondientes condiciones políticas, económicas, tecnológicas y orgánicas. Venezuela, con los principios constitucionales y la ejecución del ALBA busca propiciar este último tipo de integración en la región suramericana.

Por otra parte, las cuatro dimensiones de un proceso de Integración según Deutsch (en Morales, 2007) son: el dominio, que se compone de las poblaciones de las áreas geográficas integradas; el alcance, se refiere a los distintos aspectos políticos, económicos, sociales, culturales, donde se aplica la relación de integración; el grado, que son las gratificaciones, beneficios o carencias de las unidades integradas; y el peso, que comprende la cohesión del sistema integrado que prueba su capacidad para afrontar tensiones, presiones, desequilibrios y divisiones.

El mismo autor hace énfasis en el estrecho vínculo entre la integración y el poder, en el sentido de que se establece una relación en la cual el comportamientode los actores, unidades o componentes políticos se modifican; constituyéndose de ésta manera procesos y sucesos que trascienden a nivel internacional en la composición, dinámica e historia mundial (Morales, 2007).

La relación entre integridad y poder fue comprendida muy claramente por Simón Bolívar, en la Carta a Puyrredón, en 1818. Por ello propone constantemente la unidad americana: A“Una sola debe ser la patria de todos los americanosA”, A“Nosotros seremos más fuertes cuando estemos más unidosA”, entre muchas otras expresiones a favor de la integración de los pueblos de América, a más de la creación y presidencia de los países unidos en la Gran Colombia. Solo la solidaridad y el claro beneficio mutuo de una alianza permiten el ejercicio de las soberanías nacionales, evitando así el riesgo de ser arrasados por las grandes potencias. Los débiles unidos son fuertes y pueden abrazar una misma libertad, proteger su independencia y resguardar la justicia social.

• La propuesta de la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA) actualmente está sectorizada en los países con mayor relación fraterna como Cuba, Bolivia y Nicaragua, pero se pretende abarcar el dominio de los pueblos de habla hispana, con alcance en las áreas política, económica, social y cultural, buscando el mayor de desarrollo y bienestar de los pueblos y con el peso suficiente para garantizar la seguridad colectiva de la América integrada y, con esta cohesión, lograr el verdadero crecimiento de las naciones latinoamericanas ante el mundo globalizado.

Si se analiza al MERCOSUR, su finalidad es la constitución de un MercadoComún donde se encuentran comprometidos Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay. El objetivo primordial del proceso de integración es A“promover el desarrollo con justicia socialA” de sus países integrantes, mediante: el aprovechamiento de los recursos disponibles; la preservación del medio ambiente; las interconexiones físicas; la coordinación de políticas macroeconómicas y la complementación de los distintos sectores de la economía, sobre la base de los principios de gradualidad, flexibilidad y equilibrio. Además se propone aumentar el grado de y competitividad de las economías involucradas, ampliando las actuales dimensiones de sus mercados y acelerando su desarrollo económico mediante el aprovechamiento eficaz de los recursos (Comisión de Representantes Permanentes del MERCOSUR, 2007).

En el Mercado Común del Sur (MERCOSUR), los legisladores de los Estados fundadores todavía tienen pendiente la aprobación del ingreso de Venezuela como miembro pleno, y en cuanto a su alcance, grado y peso, resulta más restringido que el ALBA por cuanto persigue beneficios básicamente económicos y sociales, si bien con amplias gratificaciones dentro del mercado que repercuten en el fortalecimiento de la región; ahora, el peso de este acuerdo todavía está por verse, hablando del caso Venezuela, pues luchas políticas e intereses mercantiles presionan sobre el desenvolvimiento pleno de las metas planteadas.

También destacan los convenios de cooperación energética que persiguen fortalecer las economías de los países más necesitados, caso del Acuerdo de Caracas y la cooperación con Centro América y el Caribe,especialmente Nicaragua, Cuba, Haití, Antigua y Barbuda, entre otros. Sin duda, la integración impulsada por la Constitución Nacional significa la consolidación económica del bloque de naciones, no solo de un grupo de países aventajados frente a otro empobrecido. Destaca asimismo la construcción del Gasoducto del Sur, que atraviesa más de seis países suramericanos, obra de innegable importancia estratégica regional.

5-. Conclusiones

La integración como proceso supone una relación entre unidades mutuamente interdependientes que poseen en conjunto propiedades sistémicas de las que carecerían de manera aislada. Esto significa hacer de los países latinoamericanos los componentes de un sistema coherente, integrado, unificado a través de normas jurídicas aceptadas por los miembros para el logro del interés común.
Los procesos de integración han ido adquiriendo cada vez mayor importancia, pues se pretende que para alcanzar el crecimiento económico, social y cultural, las regiones se incorporen a la economía mundial globalizada. En este sentido la década del ochenta marca un gran cambio económico mundial con el desarrollo de importantes procesos de integración regionales como la ampliación de la Comunidad Europea, ahora Unión Europea, hacia los países del Sur y Este de Europa, el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (NAFTA), el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA), el Mercado Común del Sur (MERCOSUR) y la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA), en oposición al ALCA, entre otros acuerdos tendientes a la integración.
Conforme se ha transformado la comunidad jurídicainternacional igualmente se han suscitado cambios en el ámbito de acción del Derecho Internacional y Constitucional. Esto se evidencia cuando en un principio las relaciones entre los Estados era de absoluta independencia y operaba el principio de la territorialidad del Derecho, y posteriormente se constata lo que Savigny denominó la Comunidad de Derecho, en la cual es deber de los Estados aplicar el Derecho supranacional en los supuestos de hechos regulados por estas normas. Es por lo expuesto que actualmente impera la dependencia entre los Estados, hasta el punto de llevar a cabo entre ellos una integración en el orden económico, político, social, cultural y jurídico.
Como consecuencia del proceso integrador entre los Estados, en Venezuela surgen nuevos instrumentos normativos que persiguen beneficios económicos, financieros, culturales y políticos, además de la ejecución material de mecanismos ajustables a los confines del territorio latinoamericano integrado, con miras a lograr los macro objetivos propuestos por la región.
Los pactos y convenios multilaterales suscritos por el Estado venezolano propulsan la dinámica interna del Derecho Internacional, sin dejar de lado el rol activo de la sociedad y la consiguiente multiplicidad de fuentes jurídicas y la complejidad que esto genera. En este sentido, queda en evidencia la relación estrecha que existe entre el Derecho Constitucional y el Derecho Internacional Público, cuya conjugación es el origen del derecho comunitario supranacional. Desde que la Constituyente introduce elementos claros a favor del proceso de integración y regula laadaptación de las instituciones constitucionales internas del Estado a un consecuente proceso comunitario, es que en Venezuela se ha dado fuerza y fundamentos sólidos a la integración latinoamericana.

La lógica del poder también sustenta la necesidad el proceso de integración del sub-continente, ya que, por una parte, tiene la virtud de evitar los riesgos de la exclusión de la dinámica del progreso y crecimiento económico y social del proceso de globalización, y, por otra parte, el aprovechamiento de los vínculos comunes de carácter étnico, cultural, social y religioso que une a nuestras naciones garantiza la consolidación de naciones organizadas y con plena conciencia de su papel fundamental en el mundo actual.
La adopción de la doctrina bolivariana y la redefinición de las relaciones internacionales, tomando en cuenta los anteriores postulados, componen un todo coherente dentro del constitucionalismo venezolano.
Aun sin enumerar en esta investigación todas las bondades o riesgos del proceso de integración latinoamericana, destaca su relevancia dentro del panorama político y jurídico vigente, en donde el fortalecimiento de potencias económicas requiere del contrapeso que sólo puede darle la unión de naciones, como bien lo ha entendido Europa. Por ello, la innovadora propuesta de la Constitución nacional sobre una comunidad de naciones latinoamericanas y caribeñas, además de reducir obstáculos jurídicos para que efectivamente se logre el proceso de integración, se constituye en la vía más idónea para estimular el desarrollo integral de la nación en conjunto con la región latinoamericana.


Política de privacidad