Consultar ensayos de calidad


Crisis del Estado Populista - tres grandes ciclos de la Argentina moderna



Tarcus. Crisis del Estado Populista.

Las dictaduras de los 70 en Latinoamérica apuntaron a rematar las últimas versiones de los Estados Populistas, su crisis terminó por revivir el muerto de la democracia burguesa, relegitimando los viejos partidos que maquillados con su imagen democratica histórica, lejos de revertir las regresiones sociales de las dictaduras, van a profundizar y completar el desguace del Estado de Beneficio y disciplinar a las fuerzas populares. A lo largo y ancho de Latinoamérica los partidos populistas fueron los que taparon el agujero político del poder económico y militar, que durante todo el siglo habían fracasado en la construcción de un partido organico de clase, lo cual había llevado justamente a poner al ejército en la tarea de asumir el poder político. La crisis del régimen de acumulación sustitutivo, en medio de la crisis capitalista mundial de 1973-1974 da comienzo a la configuración de una forma nueva de dominación estatal. Ésta consta de tres procesos: dictadura, gobierno de Alfonsín, gobierno de Menem. La dictadura, gracias al régimen de violencia y terror sin precedentes logró comenzar esta “cirugía mayor” que afectó toda la estructura social de dominación, acumulación, representación, etc., pudiendo atacar aquellas instituciones del EB que las anteriores dictaduras habían mantenido. La reforma financiera de Martínez de Hoz se encargó de atacar lo mas facil, las instituciones mas keynesianas, que operan en el nivel financiero, y sería la “reforma del Estado” la que acabaría conlas instituciones de redistribución legislación social mas propias del EB, luego de los continuos shocks del terrorismo de Estado y la hiperinflación.


*La naturaleza burguesa del estado capitalista no deriva necesariamente en que el aparato de estado esté instrumentalizado por la clase dominante. Es “abstrayéndose” de su verdadera identidad de de clase que el estado garantiza la reproducción de la sociedad de clases.
A cada régimen de acumulación le corresponde una forma de estado, las crisis de los regímenes de acumulación amenazan la continuidad del sistema, implicando la posibilidad/necesidad de una reformulación de las relaciones sociales. La clase dominante, para constituirse hegemónica tiene que hacer pasar sus intereses particulares por intereses generales/nacionales. Tarcus propone una crisis de hegemonía que empieza en el 30, que se intentara resolver con una “revolución pasiva” (Gramsci) por un sector de la clase dominante (Pinedo) en unidad contradictoria con la “restauración infame”.
Si el estado es la condensación de las relaciones de dominación, el gobierno es quien moviliza los recursos controlados por el aparato estatal y el régimen es el sistema y modalidades de acceso a los roles de poder/gubernamentales vigentes dentro y fuera de lo legal/jurídico (O’Donnell). Las crisis en cada uno de estos momentos no implican necesariamente crisis y cambios en otro. Un cambio profundo en el régimen de acumulación/estructura de clases implicaría la necesidad una transformación estructural de la forma deestado –el agotamiento del modelo distribucionista y de industrialización liviana entraría en crisis en el 52, el desarroliismo de Frondizi y el corporativismo de Onganía serían dos momentos en la segunda etapa de industrialización.
Tarcus utiliza el concepto de modernización capitalista, porque da cuenta de los procesos de transformación de una fase capitalista o de estado a otra, no en un sentido evolucionista, sino surgidos de las luchas entre las clases antagónicas o al interior de las clases dominantes.
El populismo no señala una forma de gobierno o de régimen, sino una forma de acumulación (sustitución de importaciones y redistribución), una forma de estado (interventor, amortiguador de los conflictos de clase por hegemonía), y una estructura de clases (proletariado sindicalizado, reconocido y con cierto acceso al poder y fuertemente cooptado) donde el estado estructura un “pacto populista” entre el capital y el trabajo.

Tres grandes ciclos de la Argentina moderna.
De 1880 a la crisis de 1930, la Argentina se acolpa al mercado mundial como agroexportador, siendo la renta diferencial la fuente principal de excedente, atando al país a la dependencia de factores externos de los cuales depende la colocación de las exportaciones. Esta dependencia de factores fluctuantes desalienta las inversiones especializadas, manteniendo una situación de atraso usufructuado por una minoría oligarquica unificada. La organización estatal fue condición de este desarrollo. Se conforma entonces una correspondencia entre economíaliberal y política conservadora (falta de hegemonía).
En 1930 la crisis mundial y el agotamiento de la frontera agraria imponían la necesidad de un gobierno duro para mantener la cuota de ganancia a costa del nivel de vida de la población, desligado de esta y en contacto íntimo con los altos círculos capitalistas. Yrigoyen era incapaz de tal cosa, y la mejor solución para las clases dominantes fue el golpe del 6 de Setiembre de 1930. Se empieza a perfilar la necesidad de un tipo nuevo de estado con las exigencias de políticas proteccionistas por parte de las entidades capitalistas.
Ante la crisis, entre la opción recesionista y la industrialista se opta por la segunda. Se implementara a partir del 33 por el equipo Pinedo. Según M. Peña se configura una unidad entre el sector agraria y el industrial de la clase dominante, Murmis y Portantiero especifican que esta alianza se da entre los mas grandes de cada grupo (Sociedad Rural y UIA) y según Sabato-Shvarzer hay una clase dominante homogénea que maneja su capital líquido según la coyuntura, siendo alternativa y simultaneamente comerciante, terrateniente e industrial.
El mercado industrial interno se fue convirtiendo ya no en apéndice de comercio exportador primario sino en el area dinamica de la economía, atrayendo capitales de todas las demas areas, incluso del extranjero (EEUU), por los beneficios de explotar mercados altamente protegidos. Recién en 1943-46 el estado interventor se transformara en el estado benefactor populista, con la introducción de políticasredistributivas hacia abajo, ausentes en la década del 30 –por otro lado el aumento del ingreso popular es fundamental para el desarrollo del mercado interno-.
La configuración de estas políticas, sin embargo, estaban mas alla incluso de los sectores mas lúcidos de la clase dominante, y recién después del 17 de Octubre del 45 Perón pudo llevar adelante aquello que había recomendado –como capitalista colectivo ideal- en su discurso del 44 en la Bolsa de Comercio.
-Transferencia del ingreso del sector agrario al industrial
-Proteccionismo industrial
-Intervención del estado como propietario (nacionalización o creación de empresas públicas)
-Control de los recursos financieros (nacionalización del Banco Central)

Se cumplen las premisas de Pinedo en lo financiero, pero se acompañan con aumqnto en la participación asalariada en el ingreso neto total, incrementandose los salarios directo e indirecto.
Este patrón se mantuvo a lo largo de todo el desarrollo del modelo populista (1946-1976). Alcanzó diversas ramas desde su inicio en los bienes de consumo inmediato, tuvo variantes “concentradoras” y “distribucionistas”, pero los gobiernos y regímenes que sucedieron al golpe del 55 fueron fruto de esa crisis de hegemonía no resuelta, pero siempre operaron dentro del marco del sistema heredado del peronismo, nunca se planteó un retorno a la era agroexportadora.
El agotamiento de la segunda etapa del modelo mercadointernista, la crisis mundial del 73-74 y el proyecto refundacional de la dictadura (plan Martínez deHoz) van a cerrar este ciclo y abrir uno nuevo.

Ciclos y crisis del capitalismo

Quienes encabezan la estructuración de estos tres ciclos se conciben a sí mismos como modernizadores del sistema, que impugnan lo anterior por obsoleto para ubicar a la nación en el contexto internacional. Por lo tanto las crisis y recomposiciones del sistema estan en consonancia con los ciclos del capitalismo mundial.
La primera etapa se desarrolla en la fase expansiva del capitalismo, de la libre competencia al imperialismo. Por su elevada renta natural, Argentina se convierte como país periférico, en una de las primeras naciones exportadoras de materia prima. La segunda etapa, con una tasa de crecimiento mas baja esta caracterizada por las crisis agudas del capitalismo. La tercera etapa –capitalismo tardío- es una nueva etapa de expansión, impulsada por el estado benefactor y las medidas keynesianas y una relación de colaboración entre capital y trabajo. Los países periféricos, tras la reconfiguración del mercado mundial con las guerras mundiales, se convierten en productores de industria ligera, pero en lugar de pasar a ser competidores, pasan a ser consumidores de bienes de equipo –inversión privada de caracter productivo-. La crisis del 73-74 es la crisis del modelo keynesiano, redistributivo, estatista. Las transformaciones de los partidos populistas en los países periféricos dan cuenta del agotamiento de este modelo.
La crisis del estado populista
La crisis comporta una renovada agresividad de los capitales contra lafuerza de trabajo y entre los capitales, para desvalorizarlos y recuperar la tasa de ganancias (Gilly).
Se recomponen las clases y las relaciones entre ellas. Se hace demasiado costoso el mantenimiento del EB (hay crisis fiscal). a) Agotamiento de la 2da etapa de la ISI b) Crisis mundial 1973/74 c) Dictadura y Plan Martínez de Hoz.
Plan Perón-Gelbard: último intento populista, último tramo de la ISI (perjudicado por la transnacionalización de la economía). Pretende diversificar las inversiones extranjeras en las areas productivas (renegociar la dependencia sin romper con el modelo). La crisis frena las inversiones y expande el mercado financiero internacional (por la sobreacumulaciòn de capitales propia de la crisis): inversiones especulativas y endeudamiento externo.
La dictadura impone el Plan Martínez de Hoz para llevar adelante la reestructuración. Se debe destruir la estructura anterior para imponer una base irreversible para los siguientes gobiernos constitucionales.
- Reestructuración económica: del capitalismo argentino y de la integración en el mercado mundial. Apertura de la economía para romper la ISI (reducción de aranceles, manipulación del tipo de cambio). Se vuelve a configurar un sistema de grandes capitales exportadores (el mercado interno estaba contraído por la crisis).
- Política: relación entre el estado y la sociedad. Privatización de las empresas estatales y desmantelamiento del EB. Reforzamiento del aparato represivo.
- Social: relación capital-trabajo. Proletarización de sectoresmedios, reducción de la clase obrera industrial dentro del sector asalariado, pauperización, marginalidad. Agresión a la identidad de clase: diferenciación salarial, dependencia del salario del rendimiento individual, tasa de desocupación estructural, asociación de sectores asalariados al capital, en perjuicio del conjunto (movilidad social liberal) y pegandolos al éxito de su propia empresa por sobre su clase. Control del capital sobre el espacio fabril (flexibilización, , intensificación, tecnologización, descalificación).
Nuevo crecimiento económico EXCLUYENTE. Aumento del 30-40% anual en la producción de grano con demanda nula de mano de obra, lo mismo que el petróleo (grandes inversiones de capital, sólo 100 o 200 obreros). División del proletariado entre activo y excluido. Desmantelamiento del sindicalismo combativo. Crecimiento del poder corporativo a expensas del sistema de representación.
Conclusión: crisis del populismo y alternativa socialista.
Las ideologías liberales habían estado latentes durante el populismo, pero aparecen ahora frente a la crisis para darle la “única salida posible”. El populismo se derrumba y arrastra a las izquierdas que lo habían tomado como atajo hacia las masas. Según ellos la tactica consistía en correr por izquierda al populismo, apoyarlo y superarlo, la lucha antiimperialista devendría lucha anticapitalista. La base obrera desplazaría a la cúpula burguesa del peronismo. Sucedió todo lo contrario, y la crisis y reconfiguración del sistema incluye también a las izquierdas.


Política de privacidad